El gobernador de Río Negro denunció la falta de inversión en rutas nacionales por parte del Gobierno de Javier Milei. Advirtió que, tras varios pedidos sin respuesta, podría recurrir a la Justicia Federal.
El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, expresó su malestar ante la inacción del Gobierno nacional en el mantenimiento de las rutas nacionales que atraviesan la provincia y adelantó que evalúa impulsar una acción judicial federal si no obtiene respuestas concretas. “Hemos reclamado una y otra vez, pero no nos escuchan. Lo único que queda es la Justicia”, advirtió.
El mandatario rionegrino se suma así al reclamo de otros gobernadores por la coparticipación automática de los fondos recaudados por Nación, y por la ejecución de obras claves para la logística y seguridad vial del interior del país.
Críticas por el abandono de rutas emblemáticasEn declaraciones recientes, Weretilneck apuntó específicamente al >estado crítico de la Ruta Nacional 40, una de las más emblemáticas del país y eje fundamental del turismo y la producción patagónica. También mencionó otras rutas deterioradas como la 3, 22, 23, 51, 250 y 251.
“Las rutas están destruidas y sin inversión nacional, pese a que los rionegrinos aportamos con el impuesto a los combustibles”, afirmó.
El gobernador aseguró que la Nación recaudó más de dos billones de pesos solo en concepto de impuestos a los combustibles, pero que no destinó recursos a la Dirección Nacional de Vialidad ni a la mejora de la infraestructura vial en las provincias.
Tres propuestas rechazadasWeretilneck reveló que presentó tres alternativas al Gobierno nacional para abordar el problema, y todas fueron rechazadas:
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Provincializar las rutas nacionales.
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Transferir la operación y mantenimiento a la provincia.
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Establecer un plan de obras y mantenimiento financiado por Nación.
“Ninguna fue aceptada. A todos los planteos hemos tenido negativas u oídos sordos”, lamentó.
El conflicto por los fondos coparticipablesEl mandatario rionegrino indicó que los gobernadores están coordinando una audiencia conjunta con el Gobierno nacional, para reclamar que los fondos que corresponden a las provincias por impuestos nacionales se transfieran automáticamente, sin depender de decisiones políticas discrecionales.
“Nosotros representamos a millones de argentinos. Si no hay respuestas, vamos a los tribunales. No podemos permitir que las provincias sigan siendo castigadas presupuestariamente”, sentenció.