Un adolescente podrá viajar con su madre y abuelos por Sudamérica luego de que el padre no mostrara interés en su vínculo familiar, y tras un proceso judicial de autorización.
Un adolescente de 15 años podrá viajar con su madre y sus abuelos maternos por Sudamérica, luego de que el padre del joven, que no tiene contacto con él desde la separación, no mostrara interés en otorgar su autorización para los trámites fronterizos. La madre del adolescente inició un proceso judicial en el fuero de Familia de Viedma, explicando que no podía dejar a su hijo solo y que los abuelos maternos tenían planificados varios viajes en auto por la región.
El joven expresó su deseo de viajar con su madre y abuelos, mencionando la inexistencia de relación con su padre y destacando su cercanía con los abuelos maternos. Ante la imposibilidad de localizar al padre, ya que se desconocía su domicilio, se ordenó la publicación de edictos en el Boletín Oficial, advirtiendo que, en caso de no presentarse, se le asignaría un Defensor de Ausentes.
Al no haber respuesta del progenitor, se designó a una Defensora de Ausentes, quien indicó que no tenía objeciones sobre la solicitud de autorización para el viaje. Finalmente, la jueza de familia resolvió que el adolescente podría viajar con su madre y abuelos, inicialmente a Brasil, Chile y Paraguay, por tiempo indeterminado y sin la necesidad de realizar un trámite repetido para cada viaje futuro.
La jueza consideró que no había perjuicio para el adolescente ni vulneración de los derechos del progenitor ausente.