Un control vehicular realizado este domingo por la mañana en el kilómetro 2049 de la Ruta Nacional 40, en Bariloche, terminó con el decomiso de 29 truchas arcoiris capturadas de manera ilegal y elementos de pesca caseros. Los ocupantes del vehículo no contaban con permiso de pesca, por lo que se labró un acta de infracción y se dio intervención a la autoridad de pesca.
Un operativo de rutina del Cuerpo de Seguridad Vial se transformó en un importante procedimiento contra la pesca furtiva en Bariloche. El hecho ocurrió en la mañana de este domingo, cuando personal policial detuvo un vehículo sobre la Ruta Nacional 40, a la altura del kilómetro 2049.
Control vehicular que derivó en un decomiso
Durante la identificación de un Renault Duster, los efectivos constataron que en el interior viajaban cinco personas de distintas edades, provenientes de localidades cercanas a San Carlos de Bariloche. Al solicitar la documentación, se verificó que ninguno contaba con permiso de pesca vigente, lo que encendió las alertas del personal policial.
29 truchas arcoiris y elementos caseros de pesca
Al revisar el vehículo, los agentes hallaron 29 truchas arcoiris, además de cuatro tarros con implementos de pesca caseros y una bolsa con cinco kilos de masa utilizada como carnada. La cantidad de peces y el tipo de elementos encontrados confirmaron que se trataba de una captura ilegal a gran escala.
Acta de infracción y aviso a la autoridad de pesca
Ante la infracción constatada, se procedió al secuestro inmediato de las truchas y de todo el material de pesca, y se labró el acta de infracción correspondiente. En paralelo, se dio intervención a la autoridad de pesca, que dispuso el decomiso total de lo incautado, en el marco de la normativa vigente para la protección de los recursos ictícolas.
Un mensaje contra la depredación furtiva
Desde las fuerzas de seguridad destacaron que este tipo de procedimientos refuerza la lucha contra la pesca ilegal, una práctica que pone en riesgo los ríos patagónicos y el equilibrio ambiental de la región. La presencia activa de controles sobre las rutas nacionales no solo apunta a la seguridad vial, sino también a la preservación del patrimonio natural de Río Negro.
