Una vivienda en la que funcionaba un geriátrico que no contaba con habilitación y mantenía a abuelos en pésimas condiciones sanitarias deficientes fue clausurada este lunes por la mañana en la localidad de Cipolletti. El lugar ya contaba con varias denuncias previas. Los abuelos fueron llevados al hospital y luego serán reubicados en lugares que les garanticen bienestar.
Se informó que poco después de las diez y media de la mañana, una gran cantidad de agentes municipales, provinciales y también efectivos policiales iniciaron el procedimiento en una vivienda del paraje Cuatro Esquinas en Cipolletti, donde funcionaba un geriátrico.
La comitiva fue encabezada por el subsecretario de Fiscalización de la municipalidad, Fernando Zúñiga, junto con su equipo, y personal de la subsecretaría de Adultos Mayores del Ministerio de Desarrollo Humano de la provincia.
De acuerdo con lo publicado por LMNeuquén, entre las irregularidades detectadas se destacó que el lugar carecía de habilitación comercial, presentaba plagas, no contaba con una ambulancia para emergencias, carecía de póliza de seguro, no tenía autorización de Salud Pública y carecía de extintores, luces de emergencia y señalización, entre otras anormalidades.
Como si ello fuera poco, el edificio donde funcionaba ese geriátrico tenía deficiencias en la instalación eléctrica y, como no tenía calefacción, se utilizaban las hornallas de una cocina para mitigar el frío.
Debido a las graves irregularidades denunciadas y corroboradas durante el procedimiento, se decidió el traslado de los abuelos al hospital Pedro Moguillansky para ser sometidos a un control de salud. Posteriormente, se resolvió derivarlos a otros centros geriátricos para su reubicación.
Zúñiga, en conversación con LMCipolletti, indicó que ese geriátrico ya “había sido notificado en reiteradas ocasiones por distintas denuncias que fueron llegando; hubo prórrogas y ahora se avanzó con la clausura”. También señaló que se dio intervención al juzgado de Faltas Municipal.
