En los inmensos pabellones de la Feria de Shanghai, empresarios y funcionarios de 155 países exhiben orgullosos los productos que quieren instalar en el mercado más grande del mundo. La presencia de Argentina en la China International Import Expo (CIIE) 2025 no se destaca por la visita de emisarios del gobierno nacional, sino por la participación de 13 compañías de carne, que buscan expandir las exportaciones argentinas. A miles de kilómetros del “YMCA” de Javier Milei en la residencia de Donald Trump y a contramano de las presiones republicanas para “sacar” al gigante asiático del suelo argentino, representantes del sector resaltan la importancia estratégica de las inversiones chinas en nuestro país y piden más presencia de funcionarios en este tipo de eventos.
En una entrevista con Página/12, Alejandra Conconi, directora ejecutiva de la Cámara Argentino China, rechaza las declaraciones del secretario del Tesoro, Scott Bessent, y asegura que “si sacamos” a China de la Argentina, “se cae la industria nacional, el abastecimiento de insumos y el agro”. Además, subraya que desde septiembre China se convirtió en nuestro principal socio comercial y mustra su preocupación por la posible ralentización de la llegada de nuevas inversiones.
-¿Qué importancia tiene la feria de Shanghai para Argentina?
-China volvió a ser nuestro primer socio comercial. Desde el año 2020, que no escalaba a ese lugar. Y la CIIE es la feria donde las experiencias de marca país se presentan al mundo. Por eso, mientras estamos charlando, tenemos alrededor los stands de Brasil, Colombia, Ecuador y cada país que pelea por atraer a las grandes agencias. En esta feria no solamente vienen compradores de alimentos, sino también grandes agencias de lo que es el turismo emisivo de China. Tenemos a Ecuador que quiere llevarte a las Islas Galápagos y nosotros que te queremos llevar a los cruceros a la Antártida. Entonces estamos todos intentando influenciar en el crecimiento de los atributos de nuestra marca país.
-¿Cómo estamos dando esa pelea? ¿Qué trabajo se está haciendo acá?
-Año tras año, la Embajada Argentina en China lidera el trabajo y, en esta edición, es relevante cómo se han organizado los empresarios residentes. Ya institucionalizamos este encuentro en Shanghai todos los 5 de noviembre, y tenemos nuestros colegas que viven en la región y en las distintas ciudades. La patente de un producto o un tratado para que haya nuevas aperturas y, por ejemplo, entre un dulce de leche, son trabajos que a veces llevan un año y medio. Y eso solo puede pasar cuando vos tenés argentinos residentes que viven en el largo plazo. Y mientras hacen montones de negocios van trabajando en esta construcción que con China es nueva.
En China se necesita presencia de alto nivel de funcionarios argentinos. En los grandes momentos de las ferias que incentivan las exportaciones. En un mundo en donde los eventos en agro hacen que cambien mucho más rápido las exportaciones de maíz, de soja. Todo el tiempo hay que estar trabajando en la actualización de esos marcos fitosanitarios. Y además vemos que Asia es ávida de nuestros productos. Es el espacio natural complementario que no es Estados Unidos ni la Unión Europea que compite con nosotros. Ayer charlaba con un socio nuestro y le preguntaba por Filipinas. Y me dice, “sí, se abrió Filipinas para el mercado de la carne porcina argentina y hoy ya es nuestro principal destino”. Entonces, China también es como un hub para venir y empezar a trabajar también con otros países de Asia.
-Decías que es importante que vengan funcionarios de alto rango, ¿vinieron funcionarios del Gobierno Nacional, más allá de la Embajada?
-Vinieron de la Embajada y tenemos representantes de las provincias de La Pampa, Tierra del Fuego y, sobre todo, ministros de Salta, que están trabajando por acuerdos de zonas francas.
-Y con el Gobierno Nacional, ¿cómo ves ese vínculo?
-El 18 de noviembre del año pasado, en el marco del G20, el presidente Milei y el presidente Xi Jinping se estrecharon manos. Fue impactante cómo eso motorizó toda una serie de visitas de alto nivel de China. Esa foto es simbólica y los ministros chinos la están viendo. A partir de ahí tuvimos la visita del viceministro de Agricultura, el viceministro de Aduanas, el jefe de la Reserva de Abastecimiento de Alimentos de China. Todos ellos, entre febrero y junio. Y pasaron cosas. En marzo se habilitaron nueces, se fueron habilitando distintos tipos de marcos que el sector empresarial los estaba ávidamente esperando.
-¿O sea, es necesario que más funcionarios del gobierno se acercan?
-Si. Necesitamos que esa agenda. Sobre todo del agro y de la exportación, que es muy importante para llegada de divisas. Los esperamos.
-¿Cómo estás viendo el tema de la relación con Estados Unidos y esas imposiciones que quieren poner de la administración republicana con la lógica de sacar a China de la Argentina?
-No lo tomamos totalmente en serio. ¿Qué sería sacar a China de Argentina? El día que saquemos a China, se cae la industria nacional, se cae el abastecimiento de todos los insumos, se cae el agro, porque nuestro país tiene una interdependencia y una relación profunda, es el principal socio. Pero además, hay montones de hazañas a nivel científico, académico, cultural. El encuentro de China con Argentina es mucho más que comercio. La CONAE fue premiada, reconocida a nivel internacional, por la cooperación en la estación del espacio profundo. El Mundo tuvo la foto del lado B de la Luna. Esas son cuestiones que los científicos las valoran, todas estas estaciones, observatorios, las cooperaciones, el apoyo que China da en los desarrollos científicos, sobre todo técnicos. Entonces, eso no va a pasar. Porque además tenemos un país soberano, donde las instituciones subnacionales, todos los gobernadores de Argentina, como diría León Gieco de Ushuaia a La Quiaca, se han expresado en que nadie va a estar marcándole la agenda a los gobernadores de a quién tienen que recibir en sus provincias. Y las provincias se benefician de la cooperación con China.
-Justo en estos días hay mucha preocupación por la posible suspensión del proyecto del Radiotelescopio CART en San Juan…
Hay ralentizaciones que a veces perjudican a ciertos sectores, sin embargo, son cooperaciones de muchos años. Cuando llegamos a que exista algo tan avanzado, en que ya llegaron los insumos críticos para que funcione un observatorio, son 15 años de trabajo, de negociaciones. Y la ciencia es un sector que históricamente requiere de apoyo. En Latinoamérica, nosotros necesitamos de la cooperación internacional para tener los insumos necesarios para trabajar y hacer ciencia. Esperamos que este, como muchos otros proyectos, sigan adelante.
-El vínculo que el gobierno tiene con Estados Unidos y las presiones de Donald Trump, ¿pueden afectar las inversiones chinas en Argentina?
Es importante remarcar que los vaivenes de la política no las afectan tanto a las inversiones de carácter estratégico y de muy largo plazo. Porque buscan el abastecimiento de un recurso que es importante, que es estratégico para una cadena de valor. Llamémoslo litio o maíz. Entonces, observamos que, en general, los grandes actores de grandes empresas chinas nos ven en el largo plazo, y también confiados en que, más allá de expresiones de países extranjeros, en nuestro país hay marcos jurídicos que se respetan, que se siguen adelante.
Habiendo dicho esto, la preocupación está en las nuevas inversiones, que a veces son público-privadas. Ahí sí dependen de que las delegaciones del más alto nivel llegue en el contexto de misiones. Eso es esperable.
-Es decir, ¿la preocupación no es tanto por las que ya están en curso, sino por las nuevas?
Sí. Por la llegada de nuevas inversiones, que así y todo se están anunciando.







