“Milei, la coima de tu hermana”, decía el cartel de uno de los jubilados que participaron este miércoles de la convocatoria para protestar contra la motosierra libertaria y el veto del Presidente a la ley de aumento de haberes, ratificado la semana pasada en la Cámara de Diputados. La protesta frente al Congreso, impulsada como cada miércoles por las organizaciones de jubilados, se trasladó hacia la Plaza de Mayo con el acompañamiento de agrupaciones políticas, sociales y sindicales, personas con discapacidad y gente de a pie. Frente al Cabildo se realizó una conferencia de prensa y una radio abierta, en la cual estuvieron a la orden del día las referencias al escándalo de corrupción que tiene al Gobierno contra las cuerdas, así como también los llamados a redoblar la lucha contra el ajuste y exigir la recomposición del poder adquisitivo de las jubilaciones y la extensión de la moratoria previsional. “Milei veta el aumento de jubilaciones porque responde explícitamente a las indicaciones del Fondo Monetario Internacional”, dijo a Página/12 Ana Valverde, referente de la Unión de Trabajadores Jubilados en Lucha (Utjel).
“El FMI considera que los jubilados no debemos recibir nada porque según ellos ya no producimos y somos un gasto. Lo que se olvidan de decir es que nosotros y generaciones anteriores a la nuestra trabajamos y levantamos el país, construyendo desde los autos o las heladeras hasta la ropa, las escuelas o los hospitales”, agregó Valverde. Por su parte, Manuel Gutiérrez, integrante de la Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones de Jubilados y Pensionados, consideró en diálogo con este diario que “el comportamiento policial de hoy, que fue limitado a comparación de lo que ha ocurrido en todas las represiones que hemos sufrido, es un síntoma de la debilidad en la que está hoy este gobierno y en el cuidado de no generar hechos que se le puedan volver en contra y agudicen la crisis política”. “No es que hoy no nos pegaron porque se volvieron democráticos, sino porque evaluaron que no les convenía”, consideró y afirmó que “nuestra lucha va a continuar a pesar del veto de Milei porque la causa de los jubilados es estructural, ya que implica revertir el modelo económico en tanto sistema que se sustenta en hambre, la desocupación y la caída de salarios y jubilaciones”.
Con el ruidazo de las 15 frente al Congreso comenzó la protesta de las organizaciones de jubilados, quienes estuvieron acompañados por agrupaciones políticas, sociales y sindicales, personas con discapacidad y gente de a pie que expresó su apoyo a la lucha de los adultos mayores. Posteriormente, comenzó la movilización de la columna hacia Plaza de Mayo acompañada de un enorme operativo policial con el que se vivieron momentos de tensión que, sin embargo, no terminaron en la típica represión que llevan adelante las fuerzas de seguridad que responden a la ministra Patricia Bullrich.
“Hoy estuvo con nosotros el padre de Pablo Grillo, que nos contó que lamentablemente a Pablo le está costando recuperarse de la última operación que le hicieron hace unos días”, contó Valverde. Las menciones a Pablo Grillo en los discursos de las distintas personas que hicieron uso de la palabra, así como también las referencias al fotógrafo en pancartas y carteles, fueron permanentes, como desde cada miércoles que tuvo lugar tras la brutal represión del pasado 12 de marzo.
“Siempre pañuelo, nunca gorra y menos peluca”, avisaba un cartel. Algunas de las organizaciones de jubilados que estuvieron presentes fueron el Plenario de Trabajadores Jubilados, el Movimiento de Jubilados Liberación y Jubilados Insurgentes, acompañadas de diversas organizaciones políticas y sindicales como la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), el Nuevo Mas, el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) y el Movimiento Teresa Rodríguez 12 de Abril. También estuvieron presentes trabajadores despedidos de la empresa eléctrica Secco y miembros de la Asociación Taxista de Capital (ATC) que integra la Central de Trabajadores de la Argentina. A un costado se destacaban los militantes de la Corriente Nuestra Patria, que portaban largas banderas de caña con las imágenes de Hebe de Bonafini, José de San Martín y las Islas Malvinas. No faltaron las camisetas de diversos clubes del fútbol argentino –un clásico de las convocatorias en defensa de los jubilados impulsado por hinchas de Chacarita–, ni la presencia de organizaciones de la sociedad civil, como el Movimiento Cannábico Nacional.
La radio abierta instalada en la Plaza de Mayo, de cara al Cabildo, contó con la intervención de diversos participantes. “Lo que hacen contra jubilados y personas con discapacidad lo hacen a propósito, no es un error no deseado o una consecuencia colateral. Vinieron a sacar medicamentos, a recortar atención médica y a ajustar todo lo que están ajustando. Pero no lo vamos a permitir”, aseguró Dora, de Adultos Mayores del Frente Grande. Por su parte, Sara, de Jubilados Clasistas, agradeció “el acompañamiento de los periodistas y fotorreporteros que todos los miércoles están junto a nosotros acompañando nuestra lucha, y se juegan la vida como en el caso de Pablo Grillo y otros compañeros que han perdido la vista o han sido severamente lastimados por los terribles ataques de las fuerzas policiales de Bullrich y Jorge Macri”.
A su vez, Eduardo, del Plenario de Trabajadores Jubilados, aseguró que la lucha debe continuar con más fuerza que nunca a pesar del veto de Milei. “Este último lunes nos reunimos un montón de agrupaciones de jubilados para charlar qué hacer después del veto de Milei. Es claro, tenemos que redoblar la apuesta. Hay una crisis política que raja las paredes y se acerca el momento en que va a reventar el plan económico. Por eso, los jubilados, como hemos venido haciendo todo este tiempo, tenemos que estar al frente de las movilizaciones”, señaló.
Informe: Juan Pablo Pucciarelli