El día después de la aplastante victoria del peronismo de Fuerza Patria sobre La Libertad Avanza en territorio bonaerense, el gobernador Axel Kicillof afirmó que el pueblo de la provincia castigó con su voto al gobierno de Milei. Es más, señaló que Javier Milei “lo único que trajo es daño”. También reiteró su pedido de reunión con el Presidente para discutir cuestiones de gestión y para que la Casa Rosada modifique su política de asfixia económica a la provincia de Buenos Aires, pero la llamada no llegó. “Ayer le hice varios pedidos a Milei, sin reciprocidad porque no ha parado de insultarme. Le pedí que el día de hoy levante el teléfono y tengamos una reunión. Hasta ahora no pasó nada”, lamentó el gobernador. “Es por el bien de la situación en general… Imaginate que no es que me muero de ganas pero tengo una responsabilidad como gobernador de la provincia más grande en términos de población, y viendo que el gobierno está en términos de una situación grave”, explicó Kicillof en una entrevista radial.
Kicillof le reclamó a Milei que se ponga “a disposición de una conversación” en función de “ver cómo hacemos para que no se pierdan más puestos de trabajo”. “Es importante porque están en juego tantas cosas tan importantes, no es joda”, acotó el gobernador en una extensa charla con Radio Con Vos. Pero hasta este lunes solo recibió desde el oficialismo nacional un mensaje del jefe de Gabinete Guillermo Francos para felicitarlo por la elección.
Señaló que pese al triunfo peronista en las elecciones bonaerenses “ahora no cambió todo, sigue gobernando Milei y necesitamos que cambie el rumbo”. “Tiene esa responsabilidad, cuidar a la gente, a los jubilados, a los laburantes. Lo dice la Constitución, y lo está incumpliendo. No puede gobernar por vetos y por decretos, tiene que haber consenso, no puede hacer lo que se le cante”, insistió Kicillof.
También remarcó que espera que el Gobierno no se victimice y que le eche la culpa al resultado electoral “del descalabro financiero que tienen y que vienen aculando y nos echen la culpa a nosotros. Creo que tienen que cortarla con esa línea”. “Viene acumulado –continuó– demasiados desastre la política económica: en la macro, la micro y la financiera. Y no quiero que usen como excusa el resultado de una elección”.
El gobernador también cuantificó el triunfo en la elección provincial que se dividió en 8 secciones con un total de 135 comunas: “Se castigó con el voto al gobierno de Milei, en 104 municipios superamos a la LLA”. “Habló contundentemente el pueblo bonaerense y nos tiene que orientar para seguir trabajando”, afirmó.
Consideró clave en el resultado varios factores. “Uno es el rechazo al Milei que en varias sesiones electorales no es equivalente porque la crisis pega con distinta dureza y velocidad dependiendo del perfil productivo y demográfico, aunque acá fue muy democrática la crisis que generó Milei: llegó a todos lados, aunque trata de culpar a otros”. Además de “que nadie que tenga una persona con discapacidad cercana o en su familia o un jubilado puede votar a Milei; nadie que sea un trabajador al que se le quitan derechos podría, en teoría, votar a Milei, lo mismo con alguien que vaya a la universidad”. Así como el “plebiscito” de los bonaerenses al esfuerzo provincial para construir nuevas escuelas, salas de salud y viviendas pese a la parálisis y el abandono del Gobierno nacional a un millar de obra pública para la provincia.
“Fue el propio Milei, su maquinaria de propaganda, hoy bastante destartalada, lo que resolvió jugarlo a Milei acá en la provincia de Buenos Aires, en una elección desdoblada, intermedia pero jugarla como si fuera la final del mundo: la madre de todas las batallas. Vinieron a pintar la provincia de violeta, a comerse al macrismo. Me parece un poco envalentonados con lo que pasó en la Ciudad de Buenos Aires, donde hubo un desdoblamiento de Jorge Macri, pero en la que terminó ganando La Libertad Avanza y ahí llegaron a la conclusión, el propio (Mauricio) Macri, varios errores de apreciación de varios actores con mucha relevancia”, evaluó Kicillof y concluyó: “lo que no estaban viendo que acá en provincia de Buenos Aires, lo único que trajo Milei es daño. No hay sector en la provincia, no hay región, no hay grupo social que no haya sido víctima de las políticas de Milei”.
Ante la consulta periodística sobre cuanta importancia le adjudicaba en el resultado electoral al episodio de las coimas en la Andis y cuánto al deterioro económico, Kicillof sostuvo que “esas cosas no son cuantitativamente mensurables”. “Este último episodio –continuó el gobernador– en realidad también viene a abonar algo que se venía sedimentando hace tiempo ya con la criptoestafa, con varios pedidos de coimas, ventas de cargos, cuestiones del PAMI, una seguidilla bastante larga de tiempo de hechos que el gobierno no logra explicar ni eludir y que le pegan ahí dentro del triángulo de poder”.
“Es un gobierno en permanente descomposición y muy inestable. El poder está muy concentrado y esto lo vivimos los gobernadores, lo vivo con los ministros. La verdad es que es un Gobierno absolutamente incapaz de tomar una decisión sin consultarle a ‘Toto’ Caputo y a Milei y remitirla a la cuestión económica, lo que lo hace trabado e ineficaz, es un gobierno que no existe. Es un gobierno que disimula su absoluta incapacidad, su desconocimiento, su desinterés, su desidia en una ideología de venimos a destruir el Estado desde adentro”, insistió Kicillof.
El contundente triunfo lo exhibe el máximo ganador de las elecciones legislativas del domingo, sin embargo Kicillof evitó dar pistas acerca de si buscará ser candidato presidencial dentro de dos años: “falta mucho para el 2027, ahora tenemos octubre. Gobernar es una tarea muy difícil con Milei de presidente”, respondió para luego agregar: “El tema no pasa por ahí ahora, me parece que pasa por la situación que tenemos, de enfocarse mucho y concentrarse con lo que haga el Gobierno por el resultado que tuvo”.