“El Presidente miente descaradamente cuando se refiere a mi propuesta fiscal”. Con esa frase, Juan Schiaretti salió a cruzar a Javier Milei luego de que el mandatario lo acusara de querer “aumentar el déficit en siete puntos” y de impulsar un IVA del 42% en su discurso ante la Bolsa de Comercio de Córdoba este viernes por la tarde.
Juan Schiaretti, candidato a diputado nacional por Córdoba, usó sus redes para responder las acusaciones de Milei durante su visita de campaña a la provincia. En su posteo, el cordobés rechazó la imputación libertaria y expuso los ejes de su programa: una reforma tributaria sin aumentar la presión fiscal, la eliminación de retenciones, la lucha contra la evasión y un equilibrio fiscal que, subrayó, debe estar acompañado de equilibrio social.
Milei en Córdoba: números inflados y dogma de ajuste
Mientras tanto, Javier Milei desembarcó en la provincia que lo consagró en 2023 con el 74% de los votos, decidido a apuntalar a sus candidatos legislativos. Eligió el aniversario de la Bolsa de Comercio de Córdoba como escenario para repetir su mantra de “déficit cero o nada”.En su discurso, volvió a victimizarse por las resistencias a su plan económico, insultó al kirchnerismo –“ya vimos quiénes son los forajidos”– y aseguró que su gobierno “sacó de la pobreza a 12 millones de argentinos”. Con tono mesiánico, prometió que en 2026 la inflación será “apenas un mal recuerdo”, mientras demonizaba toda alternativa que no encaje en su receta de ajuste permanente.
El escenario cordobés: marca contra nombre propio
En Córdoba, Milei busca instalar a Gonzalo Roca, candidato libertario poco conocido, mientras Schiaretti apuesta al peso de su figura y a la marca de Provincias Unidas. El jefe de campaña de La Libertad Avanza es el diputado Gabriel Bornoroni, empresario de ligado al sector de combustibles.La lista fue bendecida por Karina Milei y armada con dirigentes cercanos a Bornoroni, pero en la Casa Rosada crece la preocupación: después de la dura derrota bonaerense, las encuestas muestran que en Córdoba los libertarios aún están por debajo del schiarettismo.