Elección pareja, complicada de pronosticar, una incógnita. Algunos dan ventaja para Fuerza Patria (FP), el peronismo; otros ven que hay leve favoritismo por La Libertad Avanza (LLA), y todos coinciden en que no es fácil adelantar un ganador porque no se sabe cuánta gente va a ir a votar. Todos están de acuerdo en que mucho ausentismo perjudica al peronismo porque suelen no ir a votar los más humildes; que el peso de los intendentes del Gran Buenos Aires, en su mayoría de FP, puede ser decisivo y que habrá que ver la perfomance de Somos Buenos Aires y la izquierda. Está claro que FP gana en la Tercera Sección Electoral -La Matanza, Quilmes, Lomas de Zamora, Avellaneda, Florencio Varela, Berazategui y otros municipios populosos-; que la elección en la Primera Sección Electoral -el norte del conurbano, Vicente López, San Isidro, Tigre, San Martin, Merlo y otros municipios- es bastante pareja y que en el interior gana LLA. El mix es difícil de evaluar, sobre todo porque no se conoce el dato del presentismo.
Quienes opinan son algunos de los consultores más conocidos del país, que dialogaron con Página/12 a cuatro semanas exactas de la elección bonaerense. Es, además, una situación inédita, porque siempre en la Provincia de Buenos Aires se votaron unificadamente los cargos provinciales -legisladores, concejales- con los cargos nacionales, diputados y senadores. Y, cada cuatro años, hasta en conjunto con la elección presidencial. De manera que es un estilo de elección que no registra precedentes, porque la cabeza de las boletas siempre eran dirigentes conocidos, dado que aspiraban a ser presidentes, gobernadores, diputados o senadores nacionales. Esta vez, se supone que el peso de cada distrito será mayor.
Hay una ventaja para el peronismo
Marina Acosta de Analogías sostiene que “hoy por hoy, nosotros tenemos 36,9 por ciento FP frente a 32,3 por ciento de LLA, o sea una ventaja de 4,6 puntos a favor del peronismo. Somos Buenos Aires queda tercero con 6,3 por ciento y la izquierda cuarto con 3,5 por ciento. Hay todavía un 16 por ciento de indecisos. La PBA registra una particularidad y es que la elección de septiembre todavía está en proceso de instalación y es difícil estimar el ausentismo. Al momento hay polarización entre las dos fuerzas hegemónicas- el peronismo y el gobierno- pero el contexto de falta de pasión política va a tener una incidencia crítica según sea más o menos simétrico. En la PBA, por las características del programa político, social y económico del gobierno, la posibilidad de que los indecisos se vuelquen en su apoyo es muy baja, pero está por verse si el peronismo logra un esfuerzo adicional de movilización en contra de las políticas oficiales que pueda volverse decisivo”.
Pronóstico muy complicado
Federico Aurelio, de ARESCO, afirma que “la elección de septiembre es complicada de pronosticar por varios factores. Uno de ellos es la situación de paridad. Nosotros la seguimos viendo, pero no de ahora, sino desde la génesis de este gobierno que fue el balotaje 2023, donde en la Provincia de Buenos Aires hubo un empate. Desde ahí todas las mediciones que hicimos nunca salieron del empate entre el peronismo y LLA. Si sacabas al PRO era un poquito más, si no lo sacabas era un poco menos, pero venimos viendo establemente un escenario de paridad. Entonces, la primera cuestión es que resulta difícil pronosticar al ganador en este escenario de paridad. En segundo lugar, porque al ser una elección provincial donde no va a haber un arrastre de los cargos nacionales como en otra ocasión, el peso de lo local va a ser mayor que en otras ocasiones y eso siempre es muy difícil de medir en una encuesta de la provincia. Se puede medir bien cuando se hace una encuesta en un municipio, pero en la encuesta de la provincia es difícil ver la sumatoria de los efectos locales de cada municipio. No visualizo que haya grandes cuestiones económicas, de mejoría o deterioro, que modifiquen el posicionamiento de los bonaerenses con el gobierno nacional. Obviamente, faltan los pocos puntos que puede influenciar el efecto de la campaña electoral, pero claro, pocos puntos en un escenario de paridad pueden modificar el ganador. Con lo cual también es importante estar atento a lo que pase con los terceros espacios como Somos. Generalmente, son espacios vinculados con dirigentes que eran de Cambiemos y, por lo tanto, más antiperonistas que peronistas. Si tuvieran un crecimiento, pueden deteriorar a LLA y si tuvieran un decrecimiento beneficiar a LLA. Cada factor que evaluemos, por más que genere un movimiento de uno o dos puntos, pueden ser los puntos que determinen el ganador. El peronismo gana con claridad solamente la Tercera Sección, pero claro, es el 35 por ciento de la provincia y si vos sacás una diferencia importante en el 35 por ciento de la población y no perdés por mucho en el resto, podés ser competitivo, como hoy es el peronismo. Porque la realidad es que la Primera Sección Electoral está bastante pareja y después gana en el resto de la provincia con mucha claridad LLA”.
Una luz para Fuerza Patria
“Según la encuesta que terminamos hoy, se amplió la luz un poquito a favor de FP, pero sigue siendo empate técnico -precisa Santiago Giorgetta, de Proyección-. El peronismo está en 38,9 y LLA en 37,3, con Somos en 5 por ciento. Los indecisos: casi el 10 por ciento. Es un trabajo que cerramos este sábado. La principal preocupación sigue siendo la inseguridad, con las preocupaciones económicas en nivel alto, sobre todo la cuestión del salario y la desocupación creciendo en cuanto a inquietud. En los grupos focales que hacemos, surgió como gran tema el aumento en las tarifas, con facturas que llegan a 100.000 pesos o más. Y lo que vemos en los que probablemente no vayan a votar es que son personas enojadas con el gobierno y que votarían 9 a 1 en contra del gobierno de Milei. O sea, es electorado que el peronismo puede pelear”
Difícil ganarle a la alianza LLA-PRO
Eduardo Fidanza, de Poliarquía, evalúa que “que la convergencia entre LLA y PRO les da una base de votos entre 35 y 40 por ciento, que es difícil que el peronismo a nivel provincial la pueda descontar. Aunque haga una buena elección, como se espera, en la Tercera Sección Electoral. Pero en la Primera, que es la más populosa, ahí claramente va a perder, y el interior de la provincia en general no ha sido favorable para el peronismo”.
Arranque favorable a Fuerza Patria
“Las primeras encuestas favorecen a FP -dice Roberto Bacman del CEOP-. Su principal fortaleza es la Tercera Sección donde consigue una ventaja importante. Por ahora, obtiene también un buen resultado en la Primera Sección, que tiene municipios que juegan con FP y Tigre que está con Somos. Pero en el oeste de esa sección, el peronismo aparece fuerte, lo que hace que la elección sea pareja. O sea, clara ventaja de FP en la Tercera y pareja la Primera. Pero entra a jugar el factor del índice de votación que no está definido. Nosotros vemos un 25 por ciento de votantes que está en transición, que no sabes si va a votar o que está indeciso. Es una elección atípica, donde no hay una gran figura al frente de las boletas y que en el caso de LLA estará sustentada en Milei. Del otro lado, Kicillof, Massa y una participación de Cristina. Pero puede haber un fuerte protagonismo de los intendentes, lo que puede favorecer a FP porque tienen gran influencia en el lugar de mayor preso de la PBA, el conurbano. Allí reside el 70 por ciento del padrón electoral”.
Situación de tensión, de empate
“El gobierno se juega mucho y en la PBA el peronismo es fuerte -analiza Analía del Franco, de Del Franco Consultores-. O sea, es una elección tensa, pareja, de empate. Que se vote en secciones independientes hace que todo sea más cercano a los candidatos y se pueda precisar el discurso en cada lugar: esto le puede ayudar al peronismo por el arraigo que tiene en el Gran Buenos Aires. Al ser elecciones legislativas por ahí el electorado se anima más a apoyar a la izquierda o a Somos, en especial lo que más notamos es que pueden hacerlo los votantes de Milei que están enojados. Son jóvenes a los que les pegó el ajuste. ‘No tengo ganas de volver a votarlo’, dicen respecto de Milei, aunque no siempre la opción del peronismo les queda bien. Pero hay que ver si Somos y la izquierda toman volumen. Por ahí esta elección termina siendo un sí o un no a Milei. La participación es una incógnita. No vemos la bronca de 2001, pero tampoco es que la gente está de buen humor, hay escepticismo y desazón, especialmente en los votantes del oficialismo. La incertidumbre no mueve a votar”.
Pronóstico arriesgado
Para Artemio López, de Equis, “como es previsible, la fortaleza electoral del peronismo es la Tercera Sección Electoral. Entre otras cosas, por eso proscribieron a Cristina dado que era una candidatura muy potente en una sección que arroja la mitad de los votos al peronismo bonaerense. La decisión política del gobierno y de la política exterior norteamericana fue taxativa: esa mujer no puede competir. Pero, sin embargo, hoy sigue siendo claramente la sección donde más diferencia saca FP, como lo muestra la encuesta. Diez puntos de ventaja del peronismo, algunos dicen un poco más. Eso se compensa luego en el interior provincial. La primera sección electoral todavía no permite definir un ganador. Yo supongo que va a estar arriba la coalición de ultraderecha, por pocos puntos, pero va a estar. Por lo tanto, el mix va a ser una elección reñida. Pero lo más importante, que no se puede medir por encuestas, es el ausentismo, que es desfavorable para FP. Aumenta a medida que vos bajás en la pirámide socioeconómica. Más humildes, más ausentismo. Si el promedio de estas primeras elecciones de 2025 en el resto del país fue de 45 puntos de ausentismo, en caso de repetirse, perjudica la performance del peronismo. Así que, como ese dato no lo podemos despejar, hacer un análisis, un pronóstico definitivo es muy arriesgado. En principio, hoy lo que hay es una elección ajustada con una leve ventaja para FP, pero insisto que el gran dato de la elección es cuánta gente va a participar.