Ayer terminó el plazo legal para inscribir alianzas de cara a la contienda electoral de septiembre en la provincia de Buenos Aires. La derecha irá en unidad en un frente que tiene el nombre de “Alianza La Libertad Avanza”, en el que el partido violeta absorbió al PRO y posiblemente a un grupo de intendentes del radicalismo que se sumarán de manera independiente. El peronismo, en tanto, después de idas y vueltas, también resolvió ir en un esquema de unidad bajo el sello: “Fuerza Patria”.
Además de esos dos grandes frentes, al cierre de esta edición, estaba próximo a inscribirse uno denominado “Somos Buenos Aires”, encabezado por el partido Para Adelante, de Facundo Manes. A él se sumaron intendentes radicales liderados por Miguel Fernández –exintendente de Trenque Lauquen–; un partido de Juan Shchiaretti llamado Hacemos y los intendentes de Esteban Echeverría, Fernando Gray; de Tigre, Julio Zamora y de Chivilcoy, Guillermo Britos. Aún sin confirmación, a última hora del miércoles, seguían negociando para unirse a ellos la Coalición Cívica y el sector de Emilio Monzó. El Frente de Izquierda Unidad (FIT-U) también formalizó su participación.
Ahora quedarán por delante diez días de reuniones y discusiones acaloradas para cerrar las listas de todos los frentes electorales y repartirse los lugares para ir a competir en las urnas el 7 de septiembre.
Peronismo
Las últimas 24 horas antes del cierre de alianzas fueron muy intensas para el peronismo. Hasta último momento se tensó el proceso de unidad. Cerca del mediodía se juntaron en la gobernación bonaerense, por tercera vez consecutiva, el dueño de casa, Axel Kicillof, Sergio Massa, líder del Frente Renovador, y Máximo Kirchner, presidente del PJ bonaerense. Después de las seis de la tarde comenzó a haber definiciones: Dijeron que la “unidad es un hecho”, que habrá “un marco de generosidad entre todos los sectores”, y que el objetivo es tener “un frente con una clara identidad peronista como idea ordenadora para contrastar con el modelo de Milei”.
Dentro del frente peronista estarán, además del PJ y el Frente Renovador, el Frente Patria Grande que lidera Juan Grabois, el Partido de la Victoria, Patria de los Comunes, Unidad Popular, entre otros. El Movimiento Derecho al Futuro no es un partido político, por eso no figura.
Tras el encuentro, se conoció que también acordaron que los apoderados serán dos por sector. Por parte del Frente Renovador fueron elegidos Eduardo Cergnul y Sebastián Galmarini, en nombre del sector de Máximo Kirchner serán Facundo Tignanelli y Patricia García Blanco y por el Movimiento Derecho al Futuro, de Axel Kicillof, los apoderados elegidos fueron Mariano Cascallares y Agustina Vila.
La junta electoral también quedó integrada, y habrá un miembro por sector. Carlos Bianco por el MDF; el intendente de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini por el sector de Kirchner, y el titular del Frente Renovador de la provincia de Buenos Aires, Rubén Eslaiman.
En cuanto a las listas, arriesgan que las nacionales y provinciales van a ser más fáciles de consensuar, pero que el mayor problema será a nivel local. Para eso, se consensuó que los tres sectores trabajarán juntos durante los próximos siete días con un sistema de revisión final de los que sean elegidos por parte de las tres tribus. Los que se encuentran trabajando en la integración de las listas, y que se encargarían de la revisión de la versión final serán: Bianco y Gabriel Katopodis por el MDF, Tignanelli y Emiliano Santalla, por La Cámpora y Galmarini y Eslaiman por el FR.
Ese trabajo para la selección de las candidaturas comenzó el mismo miércoles antes de la medianoche, cuando los dirigentes empezaron a mirar y seleccionar a los postulantes que les fueron acercando los responsables de cada distrito. Durante lo que queda de esta semana van a empezar a cruzarlos. “Hay que ver qué tiene cada espacio para defender e integrar”, expresaban desde el peronismo.
La tercera sección electoral es la más importante para ese frente y deben elegir quién será allí el candidato. Suena con fuerza el nombre de la vicegobernadora, Verónica Magario para quedarse con el puesto. Durante los últimos días también se rumoreó que desde La Cámpora querían que ese lugar lo ocupe la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza. Quedan diez días para resolver esa y las demás incógnitas. El reloj de arena ya se dio vuelta.
La Libertad Avanza
El PRO, más allá de los deseos de los primos Macri, quedó absorbido bajo el sello de La Libertad Avanza. La boleta será violeta y, tras el anuncio de la alianza, los propios dirigentes del PRO admitían: “Los únicos que no querían acordar eran los ñoños republicanos, pero había que mirar las encuestas y darnos cuenta que, solos, medíamos menos de diez puntos”.
Karina Milei se encargó de mostrarse a la cabeza del acuerdo que su partido cerró con los amarillos. Pasado el mediodía, la hermana del Presidente ingresó al salón de conferencias del hotel Libertador y se sentó al lado de su armador en provincia de Buenos Aires, Sebastián Pareja, y del presidente del PRO en esa provincia y presidente del bloque de ese partido en Diputados, Cristian Ritondo. También estuvieron con ellos el diputado Diego Santilli y el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro –es decir los tres representantes del partido de Macri que estuvieron a cargo de las negociaciones durante los últimos meses–. Del otro lado, al lado de Karina y Pareja, se sentó el presidente de la Cámara Baja, Martín Menem.
“Quiero agradecer la grandeza que tuvieron cada uno de ellos para dejar sus intereses particulares de lado y unir fuerzas para ir contra el verdadero enemigo: El kirchnerismo”, dijo la hermana de Milei, que se presentó como presidenta del partido, aunque al instante se corrigió y dijo: presidente. Después acusó al peronismo de “estar atrincherado en Provincia de Buenos Aires”, resumió que: “Esto es kirchnerismo o libertad”, y aclaró que la idea es “terminarlos”.
Pareja, a su turno, recordó que el PRO demostró estar con LLA en todas las votaciones que se llevaron adelante en el Congreso desde que comenzó la gestión, pero aclaró: “Los acuerdos son sin condicionamientos”. “Acá están sentados los que entendieron eso y no han venido a plantear que quieren cargos o porcentajes. Hoy cambiaron los tiempos, la dirección es otra y sopla otro viento”, les dijo en la cara a sus aliados y remató: “no hay lugar para los tibios”.
Ritondo, después de agradecerle a Karina más de dos veces por su presencia, y de darle un beso, explicó que el expresidente Mauricio Macri “avaló que esta mesa sea la que se siente a hacer un acuerdo”, y señaló que la decisión fue “escuchar a los bonaerenses que nos pedían que vayamos juntos”. “Para nosotros es cómodo ir en unidad y es necesario porque la máquina de impedir sigue estando en el Congreso y, por eso, hay que avanzar”, finalizó. Antes, Ritondo se reunió con un grupo de intendentes que no estaban convencidos y confirmó que, finalmente, “todos están adentro”.
Los primos Macri y ese grupo de intendentes que se referencian en ellos –Soledad Martínez, de Vicente López; Pablo Petrecca, de Junín; María José Gentile, de 9 de Julio y Javier Martínez, de Pergamino–, eran los más reacios a acordar en las condiciones que terminó imponiendo la LLA. Los que sí querían convencieron a sus pares de que el PRO ya no vale lo que supo valer. “Nosotros les decíamos a los que estaban reacios: ‘Miren las encuestas. La realidad no se puede ocultar y no nos podemos mentir mirándonos en el espejo'”, cuentan y, en esa línea, agregaban: “La elección está polarizada y ¿cuánto valemos nosotros? ¿10 puntos? ¿siete?”. Algunos de ellos, ya más violetas que amarillos, se reunieron con Macri y le dijeron: “Lo que proponés es una locura y va terminar mal”. Y rematan: “Los únicos que no querían acordar son el cinco por ciento de núcleo duro, con eso no íbamos a ninguna parte”.
La discusión, ahora, seguirá todos los días hasta el 19 de julio. Esa es la fecha límite para presentar las listas de candidatos. Ya estaría definido que quien encabezará la lista en la primera sección electoral será el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela –un ex pro que se pasó a las filas de LLA–. Después, el cierre será municipio por municipio. Desde el partido amarillo pujan para que en los distritos que ellos gobiernan –son 13– el candidato que encabece la lista sea elegido por el intendente, pero nada de eso se aseguró este miércoles.