María y José, un matrimonio de adultos mayores, denunciaron haber sido difamados en redes sociales tras ser acusados de usurpar la vivienda en la que actualmente residen. Aseguran que la propiedad fue adquirida legalmente y cuentan con el respaldo de numerosos vecinos del barrio, quienes se movilizaron en su defensa.
Según relataron, en el año 2019, mientras aún vivían en Chile, accedieron a la compra de la vivienda luego de ver su venta anunciada. La pareja explicó que en ese entonces la propiedad contaba únicamente con un salón y que fue en 2020, ya instalados en el país, cuando adquirieron el terreno de manera formal y se encargaron de finalizar la construcción para habitarla.
“Nos duele mucho esta situación. Nosotros compramos con buena fe, invertimos todo lo que teníamos y ahora nos quieren echar”, expresó José visiblemente afectado. María agregó que “no solo es injusto, sino humillante ver cómo nos atacan públicamente sin conocer nuestra historia”.
Frente a la acusación de usurpación por parte de una mujer que asegura ser la dueña original del terreno, la comunidad del barrio Progreso salió en defensa de la pareja. Vecinos organizaron una junta de firmas para demostrar su apoyo y desmentir los dichos de la denunciante.
A pesar del respaldo vecinal, la pareja recibió una orden de desalojo. Sin embargo, su abogada ya anunció que apelará la medida. “Tenemos pruebas suficientes que acreditan la compra y el mejoramiento de la vivienda”, indicó José.
Mientras tanto, María y su pareja continúan viviendo con incertidumbre, aunque reconfortados por el apoyo del barrio que los ha visto construir su hogar desde cero.
