Pasó la antepenúltima ventana de amistosos antes de la Copa del Mundo y se cumplió la idea del técnico de la Selección Argentina, Lionel Scaloni, de darle minutos a la mayoría de los jugadores convocados. Los debuts de José Manuel López, Aníbal Moreno, Lautaro Rivero y Facundo Cambeses fueron la novedad más grande de estos diez días de actividad. Porque los partidos en Miami en sí, aportaron poco. Se le ganó sólo 1 a 0 a Venezuela y se goleó 6 a 0 a Puerto Rico en un trámite que se pareció mas a un entrenamiento televisado que a un cotejo con cierta tensión competitiva. Hasta dio la impresión de que varios futbolistas se aburrieron jugándolo.
Lionel Messi no estuvo ante los venezolanos por un permiso discutible que se le concedió para jugar el sábado en el partido que Inter Miami disputó ante Atlanta United por la MLS estadounidense. Pero jugó los noventa minutos del martes a la noche contra los puertorriqueños con la rareza de no haber podido señalar un gol. En esta etapa final de su carrera, el capitán de la Selección Argentina parece más cómodo armando juego y poniendo pelotas dentro del área para que otros definan que yendo adentro a resolver por su cuenta. Volvió a enredarse al salir de las gambetas y el amontonamiento defensivo de los boricuas le quitó claridad a algunos pases. De todos modos resulta de mal gusto exagerar la crítica a Messi. Posiblemente haya ensayado la posición que ocupará por detrás de los delanteros sí, como todo parece indicarlo, juega su sexto Mundial el año próximo.
El “Flaco” López acompañó durante una hora a Messi. En los primeros veinte minutos, estuvo mejor tirándose atrás y apretando la salida de Puerto Rico que en su función primaria de centrodelantero. Cuando le tomó la mano al supercrack rosarino, se atrevió a devolverle algunas paredes y le sirvió el tercer gol a Alexis Mac Allister. El trabajo del delantero de Palmeiras habría mejorado si hubiera podido marcar un gol, pero no lo marcó. De todas maneras, se ganó el derecho a una nueva convocatoria para la próxima sesión de noviembre.
Lo mismo puede decirse de los otros debutantes. Anibal Moreno entró con el partido ya resuelto ante Puerto Rico y movió bien la pelota, sin entretenerla para los costados y metiendo pases seguros y profundos. Lautaro Rivero ratificó su buena actualidad con un par de anticipos veloces y una salida clara y criteriosa desde el fondo. En tanto que Facundo Cambeses casi no entró en juego los catorce minutos que estuvo en la cancha. El proceso de incorporación a la Selección no es inmediato. Pero los cuatro nuevos dejaron buenas sensaciones. Como para que Scaloni los siga llamando.
La otra novedad que aplicó el tecnico fue la insistencia por probar un esquema 3-5-2 con tres marcadores centrales que le concedan mayor protagonismo y recorrido a los laterales. Nahuel Molina y Gonzalo Montiel (quien marcó el segundo gol ante Puerto Rico) por la derecha y Nicolás Tagliafico y Nicolás González por la izquierda aprobaron el ida y vuelta. Pero los ensayos continuarán. En noviembre se irá a Angola y a Marruecos. Y es posible que a fines de marzo se juegue en Qatar la Finalissima ante España. Scaloni ya tiene resuelta las tres cuartas partes del plantel que defenderá la Copa del Mundo el año que viene. Pero hay que estar cubierto. Cualquier imponderable puede transformar esa certeza en un montón de papeles mojados.