El secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Marcelo Rucci, acusó a las cámaras empresarias de no cumplir con la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo de la Nación, en el marco del conflicto por despidos y suspensiones en la industria hidrocarburífera.
“Acatamos lo que nos dictó el Ministerio: suspender el paro y retrotraer despidos y stand-by. Nosotros cumplimos, pero las cámaras no reaccionaron”, sostuvo Rucci, quien advirtió que “no se levantaron la mayoría de los despidos ni el stand-by” y que “hay compañeros que siguen en base ocho horas”.
El dirigente gremial destacó que solo YPF y Tecpetrol mantuvieron reuniones y avanzaron hacia un acuerdo, mientras que “el resto de la industria no acusó recibo”. Agregó que, de persistir la situación, el sindicato quedará “en libertad de acción” para retomar medidas de fuerza, con una nueva audiencia prevista para el martes en el Ministerio de Trabajo.
Rucci atribuyó el conflicto a un “cuello de botella” por la falta de obras finalizadas para la salida de ductos hacia el Atlántico, lo que generó un exceso de stock. “Lo advertimos para evitar despidos y suspensiones, pero no nos escucharon”, afirmó.
Sobre el traspaso de áreas maduras, señaló que fue “desordenado” y dejó trabajadores en condición de cesantía, aunque valoró la intervención del gobernador neuquino y los avances con YPF para regularizar la situación.
El sindicalista insistió en la necesidad de “orden, diálogo y compromiso” para garantizar el crecimiento de Vaca Muerta sin perjudicar a los trabajadores. “En el peor momento de la industria compartimos el esfuerzo. Hoy, en su mejor momento, las empresas también deben hacerlo”, concluyó.